Este libro recoge la hipótesis de Foucault que la “sociedad civil” liberal , lejos de ser una esfera de libertades naturales, designa espacios sociales donde nuestras vidas biológicas se encuentren bajo nuevas formas de control y son investidas con nuevas formas de biopoder. Para probar esta hipótesis, sus capítulos examinan la teoría crítica de la sociedad de civil -desde Hegel y Marx a través de Lukács, Adorno, Benjamin, y Arendt- desde el nuevo horizonte abierto por el giro de Foucault de la biopolítica y su recepción en la reciente teoría italiana.
Negri, Agamben y Esposito han argumentado que la biopolítica no sólo denota nuevas formas de dominación sobre la vida, sino también la relación positiva entre la vida biológica y la política que lleva a un potencial emancipatorio. Los capítulos de este libro toman esta sugerencia mediante la localización de este potencial emancipatorio de la función biopolítica de la condición humana que Arendt llama “la natalidad.” El libro procede a ilustrar cómo la natalidad es la base de una articulación republicana de una biopolítica afirmativa. Su objetivo es renovar la teoría crítica de la sociedad civil mediante la aplicación de los rastros de la natalidad como un “excedente de la vida” que resiste el gobierno opresivo de vida que se encuentra en la economía política capitalista, en el sistema liberal de los derechos, y en la familia burguesa.
Por el contrario, la natalidad ofrece la base normativa para una nueva “república de los vivos.” Finalmente, la natalidad nos permite establecer una relación entre la vida biológica y la vida contemplativa que invierte la antigua creencia en una relación privilegiada de pensar sobre la posibilidad de nuestra muerte. El resultado es una concepción materialista y atea de vida contemplativa como la vida eterna.